Por Inés Rodriguez
Según el último estudio realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) “Perspectivas del Empleo 2017”, la proporción de trabajos temporales en el país llegó a 29,1% en 2015, siendo Chile el país con más contratos de este tipo entre los países de la organización internacional. Si bien esta cifra abarca a todas las personas que trabajan de forma temporal ya que se contabilizarían a independientes, operarios, comerciantes o técnicos, también toma en cuenta a profesionales que se dedican a trabajar por proyectos específicos al interior de las empresas.
¿Las razones? Pueden ser múltiples, los últimos años han sido difíciles para el área de contrataciones. El bajo crecimiento económico ha llevado a que en algunos sectores las contrataciones se hayan reducido. La contratación temporal surge como una oportunidad para las compañías ya que les entrega una solución a la medida, sin necesidad de autorizar aumentos de personal ni generar contratos de trabajo. Al mismo tiempo ha sido la oportunidad para una nueva forma de contratar a profesionales muy capacitados.
Además, los candidatos son más flexibles a tomar este tipo de compromisos laborales, pues les permite mantenerse activos en el mercado y seguir ganando experiencia en nuevos rubros, áreas y sistemas de trabajo.
Por otra parte el beneficio que tiene este tipo de contratos es que los criterios de evaluación son más simples y directos. El empleador se fija principalmente en la capacidad del profesional para dar solución al problema específico por el cual fue contratado y en cuál será su desempeño laboral asociado a ese objetivo.
Pero el trabajo temporal no es interesante sólo para las empresas, en el caso del candidato también puede ser una experiencia positiva y provechosa. Por medio de un contrato temporal, es posible que el profesional logre permanecer en la compañía más del tiempo inicialmente proyectado. En la experiencia de Robert Half, casi el 70% de los candidatos que llegan a un empleo de forma temporal, terminan quedándose en la empresa con contrato indefinido. Por ello, es muy importante que el candidato sea capaz de mostrar su valor en un plazo de tiempo corto para que la empresa termine contratándolo en forma permanente.
Si bien, nos hemos dado cuenta que el trabajo temporal es transversal a todos los sectores, existen algunos que se caracterizan por incorporar más profesionales en esta modalidad como es el caso del retail, empresas de servicios y de tecnología.
En cuanto a los áreas funcionales en las que se utilizan más este tipo de contrataciones, son: áreas de finanzas y contabilidad, tecnología, gestión de proyectos y recursos administrativos para llevar a cabo dichos proyectos.
* Inés Rodríguez es gerenta de la División Ingeniería y Tecnología de Robert Half Chile